Lo barato sale caro, típica frase que podemos hartarnos de escuchar, sobre todo de quienes tienen algún interés en vender algo.
A veces lo gratis también puede salir caro, es cierto pero no si antes estudiamos para que vamos a utilizar esos recursos gratis y conocemos las ventajas e inconvenientes que pueden surgir.
Utilizar una plantilla gratuita por ejemplo nos puede resultar muy barato y cómodo a la hora de empezar con un proyecto web, ya está toda la parte estética programada, no tenemos que realizar ningún desembolso, por tanto ahorro de tiempo y dinero.
Pero por otro lado mañana nos podemos encontrar con una página web con la misma estética, o mil páginas web con la misma estética y eso nos puede dejar en muy mal lugar si queremos dar la impresión de tener un proyecto serio. Por otro lado si desconocemos el código y necesitamos nuevas adaptaciones para esa plantilla vamos a tener problemas a la hora de hacer modificaciones.
Si por otro lado tenemos una plantilla web de pago, podremos pedir actualizaciones y modificaciones, previo desembolso claro está pero con garantías.
Nuestro consejo, utilizar plantillas gratuitas para nuestras pruebas, conocimiento de código etc… No usarla en proyectos serios, al menos cambiarle toda la imagen estética de la plantilla, incluso incluir o excluir partes que nos interesen o no que aparezcan, cambiar colores, imágenes, etc… Si estos proyectos son para terceros y vamos a cobrar por implantar algún sistema web, es mejor o readaptar totalmente la plantilla siempre respetando la licencia de uso claro está u optar por una plantilla de pago y que nos asegure así que ninguna otra web podrá tener esa imagen, exclusividad.
Existen plantillas muyprofesionales de pago por muy poco dinero que podemos adaptar a cualquiera de nuestros proyectos, al menos mientras empecemos a conocer mejor el código y poder nosotros mismos reprogramar las plantillas adaptándola con colores, imágenes, módulos, etc…
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